EJE 2: "Marco legal del Medio Ambiente" del MODULÓ: CONDICIONES DEL EJERCICIO PROFESIONAL


2.1 Marco legal Medio ambiente: Conocimiento del marco legal argentino de medio ambiente


Leyes nacionales

Ley 25.675 “Ley General del Ambiente” que establece los presupuestos mínimos para el logro de una gestión sustentable y adecuada del ambiente, la preservación y protección de la diversidad biológica y la implementación del desarrollo sustentable. La política ambiental argentina está sujeta al cumplimiento de los siguientes principios: de congruencia, de prevención, precautorio, de equidad intergeneracional, de progresividad, de responsabilidad, de subsidiariedad, de sustentabilidad, de solidaridad y de cooperación.

Ley 25.612 Gestión integral de residuos de origen industrial y de actividades de servicio, que sean generados en todo el territorio nacional, y sean derivados de procesos industriales o de actividades de servicios.

Ley 25.670 Sistematiza la gestión y eliminación de los PCBs, en todo el territorio de la Nación en los términos del art. 41 de la Constitución Nacional. Prohíbe la instalación de equipos que contengan PCBs y la importación y el ingreso al territorio nacional de PCB o equipos que contengan PCBs.

Ley 25.688 “Régimen de Gestión Ambiental de Aguas” consagra los presupuestos mínimos ambientales para la preservación de las aguas, su aprovechamiento y uso racional. Para las cuencas interjurisdiccionales se crean los comités de cuencas hídricas.

Ley 25.831 “Régimen de libre acceso a la Información Pública Ambiental” : garantiza el derecho de acceso a la información ambiental que se encontrare en poder del Estado, tanto en el ámbito nacional como provincial, municipal y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, como así también de entes autárquicos y empresas prestadoras de servicios públicos, sean públicas, privadas o mixtas.

Ley 25.916 Gestión de residuos domiciliarios.

Ley 26.093 “Régimen de Regulación y Promoción para la Producción y uso sustentables de Biocombustibles”.

Ley 26.331 Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos.



2.2. Impacto de los procesos productivos en el ambiente


Es frecuente la expresión «civilización industrial» para referirse al mundo contemporáneo. Sin embargo, este es un término un tanto vago y que pareciera querer calificar un sistema mundial progresivamente más complejo y en el cual tiene una función principal la industrialización.

El proceso de industrialización representa el aspecto más dinámico del fenómeno del desarrollo. Es evidente que los países que hoy se consideran desarrollados, han pasado por un proceso de industrialización tal, que ha modificado la estructura de todo su sistema. Por este carácter dinámico y la capacidad de transformación estructural que le es inherente, los países en desarrollo ven en la industrialización la piedra angular sobre la cual asentar su desarrollo económico y social.

La expansión industrial ha alterado profundamente los sistemas sociales, creando nuevos bienes, diversificando los patrones de consumo, introduciendo nuevas necesidades, alterando las estructuras económicas, sociales y políticas y, fundamentalmente, acelerando el proceso de expansión económica a nivel mundial.

Como el proceso de industrialización permea a todas las manifestaciones del sistema social, afectará al medio ambiente tanto a través de su impacto directo como indirectamente, al provocar alteraciones en la dinámica social.

El impacto directo de la industria sobre la naturaleza se produce básicamente por la ocupación del espacio, la utilización de los recursos naturales y la generación de residuos: desechos y contaminantes. De estos impactos, la contaminación es el aspecto que ha sido examinado más detalladamente, y no es raro encontrar opiniones en el sentido de que sería la única forma de impacto de la industria sobre el medio. Más aún, ciertos programas de industria y medio ambiente se limitan exclusivamente a dicha manifestación.

Este enfoque prevalece en los países industrializados, cuyos habitantes sufren los efectos de la contaminación directamente, efecto en muchos casos inmediato. El hombre común lo percibe en sus lugares de trabajo o en sus zonas de residencia.

Sin embargo, hay otro vínculo estrecho entre la naturaleza y la actividad fabril, y es el que está constituido por la utilización de los recursos naturales.

El impacto sobre el medio que provoca la extracción de los recursos naturales generalmente no es perceptible por el hombre común y, a veces, no lo es ni siquiera para aquel que lleva a cabo la explotación de la naturaleza. Sin embargo, es obvio que tal extracción altera al ecosistema natural, produciendo cambios en su estructura y modificando su dinámica.

Por otro lado, los recursos naturales no son inagotables. Al menos no lo son en la dimensión temporal humana. Así pues, su utilización no puede llevar a cabo ad infinitum. El agotamiento de un recurso natural tiene un impacto negativo sobre el medio ambiente, pudiendo causar su colapso definitivo, que arrastraría con él al sistema social que depende de él para su subsistencia. Pero además tiene efectos graves sobre el proceso de desarrollo, al comprometerlo en el largo plazo.

Una de las características de la industria moderna ha sido su persistente tendencia al aumento de la escala de producción, con lo cual los impactos ambientales que produce tienden también a ser mayores.

Ese proceso de industrialización diversifica la estructura productiva en función de una demanda interna preexistente, y no altera, por lo tanto, la estructura de las exportaciones, que es la que sigue proporcionando los excedentes necesarios para el desarrollo del país.

El modelo de industrialización de la periferia, en particular en Latinoamérica, ha sido modelo sustitutivo. Reemplaza una oferta externa por una producción interna cuando estrangulamientos externos imposibilitan la satisfacción de la demanda interna.

De acuerdo con las características de los productos sustituidos, se van definiendo nuevos requerimientos a satisfacer desde el exterior en forma de equipos, materiales e insumos imprescindibles para la industria naciente. Ello se manifiesta en un aumento y una diversificación creciente de la estructura de las importaciones, que se va haciendo menos flexible y presiona cada vez más sobre la capacidad de importar del país. La importación pasa así a constituirse en elemento estratégico de la oferta global, confiriendo a la actividad económica interna una extrema vulnerabilidad frente a las fluctuaciones del mercado internacional, y perpetuando, y aun acentuando, una situación de dependencia.

Se acostumbra señalar diferentes fases de este proceso de industrialización que se iniciaría con la sustitución de bienes de consumo no duraderos, siguiendo con la industria liviana, para llegar en algunos casos a la industria pesada y a la sustitución de bienes intermedios de consumo duradero y de capital. El paso de una fase a otra vendría determinado, en parte, por el agotamiento de la fase anterior y, en parte, por las posibilidades reales de cada país de pasar a la fase siguiente.

Los productos de la primera fase sustitutiva de importaciones, aun cuando responden a una estructura de demanda determinada por la distribución del ingreso, son manufacturas más bien simples, de uso común y precios relativamente bajos; es decir, son bienes ya populares en las economías centrales (textiles, calzado, vestuario, etc.). De tal modo --y aún cuando es bajo el ingreso medio de país periférico--, con políticas adecuadas (sistemas de crédito, incremento de la ocupación terciaria, monetarización de la economía de subsistencia etc.) es posible incorporar al consumo de estos productos una cierta parte de la población.

Esta capacidad de ampliación del mercado local va disminuyendo a medida que se avanza en el proceso de sustitución de bienes de consumo duraderos, generalmente con precios más elevados y, por lo tanto, más alejados de las posibilidades de los ingresos locales.

El medio ambiente está siendo considerado como un factor natural, que define una ventaja comparativa más en el análisis tradicional. Está siendo utilizado para «explicar» la relocalización industrial a nivel internacional y legitimar dicho proceso desde un particular punto de vista. El medio ambiente, así como todo factor natural, no define por sí solo ventaja alguna para un país si éste está supeditado a la dinámica del centro, que es el que se aprovechará en definitiva de la misma.

Uno de los recursos naturales clave es la capacidad de absorción del medio ambiente, es decir, la capacidad de la naturaleza para absorber y neutralizar flujos de desechos incluyendo entre estos últimos la contaminación. Si se acepta esta situación, debería producirse un movimiento importante y un proceso de relocalización hacia países con normas ambientales menos restrictivas. Este planteamiento contiene dos falacias fundamentales. Primero, ¿Cómo se determina y calcula la capacidad del medio ambiente para absorber desechos? Segundo, es claro que se está confundiendo una ventaja natural con una ventaja que se podría calificar de institucional: una norma ambiental menos rígida. Así, ante la imposibilidad de cuantificar una aparente ventaja, se le asimila a la norma, que es el resultado de una decisión del grupo social en función de la forma en que se percibe el problema y del proceso de negociación interno en el sistema socioeconómico y político. La norma, evidentemente, es resultado de un acuerdo entre los que contaminan, los que consumen y sufren la contaminación, y el nivel político. Los efectos ambientales deben ser considerados como parte del proceso de planificación industrial, pero lo importante es que sean introducidos en la toma de decisiones como una dimensión más, que tiene su propia razón de ser dentro del proceso de desarrollo, y no como un impuesto más, un costo monetario a ser considerado en la estructura de costos.

Las normas sólo constituyen un complemento para fiscalizar y controlar, pero por sí solas son insuficientes para incorporar el factor ambiental en el proceso de planificación. La implantación de normas ambientales en los países en desarrollo se está llevando a cabo por simple reproducción de normas ambientales imperantes en los países industrializados, es decir, normas adoptadas en función de las características naturales de esos países que son diferentes de las de la periferia. La contaminación no es simplemente emisión de contaminantes, sino producto de la emisión de esos contaminantes en su interacción con el medio. El deterioro de la naturaleza está determinado por esta mutua interacción y, por lo tanto, las normas deben ser establecidas en función de las características de cada medio ambiente.

Entre otros, son los aspectos anteriores los que dan a la industrialización ese carácter integrador que llega a definir la civilización contemporánea como civilización industrial. Indudablemente el mundo de hoy es mucho más integrado que el de cualquier otra época histórica de la humanidad, y es claro que el desarrollo industrial ha desempeñado un papel fundamental en este proceso de integración. Sin embargo, si la industria tiene un carácter internacional, en su desarrollo han de tomarse en cuenta las características de cada sistema natural y la interrelación entre éste y el sistema social. Dentro de esta dinámica debe ser estimulada y promovida la industrialización como factor de crecimiento y desarrollo orientado a la satisfacción de las grandes masas de población. Y en ese contexto debe examinarse su capacidad de creación de excedentes.

Les comparto el link del archivo de lectura sobre el Marco Legal del Medio Ambiente:https://drive.google.com/file/d/1nrlq0S_7-5EH-VqfQpUTTUHtTegH8Okn/view?usp=sharing






ACTIVIDAD:


1era ACTIVIDAD:

De acuerdo a su apreciación personal, ¿Cómo cree que impacta el el ser humano en el medio ambiente?

RESPUESTA:
¿Cómo cree que impacta el ser humano en el medio ambiente?

Si bien sabemos que el medio ambiente es todo aquello que nos rodea, por lo que la relación entre Ser Humano y Medio Ambiente es inevitable, el problema es que a través del tiempo el ser humano ha sido de un mal impacto, siempre genera cambios en el ecosistemas, incluyendo la gran biodiversidad y recursos naturales.

Podemos observar un claro ejemplo en el AMAZONAS (una gran extensión de 6.800 kilómetros de río que une con sus cuencas a nueve países: Brasil, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela, Guyana, Guayana francesa y Surinam) también llamada el Pulmón del mundo) que a pesar de su importancia ecológica se encuentra en peligro por el voraz avance de la deforestación, la incursión de la ganadería extensiva y la agricultura de tipo industrial –que reclama mayor superficie pese a que tan sólo un 10% del suelo amazónico es apto para la actividad y que se ha comprobado que su suelo agota sus nutrientes después de tres o cuatro cosechas consecutivas-, ha llevado a que un área forestal considerable haya sido talada. Asimismo la industria maderera con para la industria destino a la exportación de caoba y teca para la fabricación de muebles y de otras especies como materia prima papelera, se suman como factores determinantes junto a la construcción de carreteras y los incendios. Las estadísticas muestran cómo desde 1992 y hasta 2004 la selva habría perdido más de 230.000 km2 por actividades humanas.


Estos problemas son resultado de acciones de contaminación, de aprovechamiento excesivo, de descuido o de destrucción, que en general son determinadas por los modelos de producción y consumo, y por los malos hábitos de vida de gran parte de la sociedad.




SALUDOS!!!

2da ACTIVIDAD:

-RESPONDER-

¿Qué ocurre con los procesos productivos que generan impactos negativos en el ambiente? 

Los procesos productivos, independientemente de su naturaleza (química, biológica o biotecnológica), generan cantidades apreciables de residuos cuya disposición final es el origen de serios problemas ambientales y económicos (Cardona et al., 2004) La contaminación ambiental que provocan estos residuos tanto forestales como plásticos son muy visibles en nuestros días, estos últimos aún más preocupantes, ya que no son biodegradables, por lo que permanecen mucho tiempo a la intemperie causando daños al medio ambiente y a la salud humana El impacto ambiental sobre las fuentes hídricas implica no sólo variaciones en la calidad del agua sino en su cantidad, pues el agua que antes era utilizada para el consumo humano, es utilizada para el lavado del carbón, como es el caso del daño del cuerpo del agua de Caño Chacón en El Cerrejón. 

¿Cómo se verifica el impacto ambiental que provoca la infraestructura? 

El impacto ambiental que provoca la infraestructura es la contaminación Este enfoque prevalece en los países industrializados, cuyos habitantes sufren los efectos de la contaminación directamente, efecto en muchos casos inmediato. El hombre común lo percibe en sus lugares de trabajo o en sus zonas de residencia. Se verifica mediante una Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) que es el procedimiento técnico-administrativo que sirve para identificar, evaluar y describir el Impacto ambiental que producirá un proyecto en su entorno en caso de ser ejecutado 

¿Cómo ha influido el crecimiento de la población y la industrialización en el impacto ambiental?

 Como el proceso de industrialización permea a todas las manifestaciones del sistema social, afectará al medio ambiente tanto a través de su impacto directo como indirectamente, al provocar alteraciones en la dinámica social. El impacto directo de la industria sobre la naturaleza se produce básicamente por la ocupación del espacio, la utilización de los recursos naturales y la generación de residuos: desechos y contaminantes. De estos impactos, la contaminación es el aspecto que ha sido examinado más detalladamente, y no es raro encontrar opiniones en el sentido de que sería la única forma de impacto de la industria sobre el medio. Más aún, ciertos programas de industria y medio ambiente se limitan exclusivamente a dicha manifestación. Hay otro vínculo estrecho entre la naturaleza y la actividad fabril, y es el que está constituido por la utilización de los recursos naturales.

El impacto sobre el medio que provoca la extracción de los recursos naturales generalmente no es perceptible por el hombre común y, a veces, no lo es ni siquiera para aquel que lleva a cabo la explotación de la naturaleza. Sin embargo, es obvio que tal extracción altera al ecosistema natural, produciendo cambios en su estructura y modificando su dinámica. Por otro lado, los recursos naturales no son inagotables. Al menos no lo son en la dimensión temporal humana. Así pues, su utilización no puede llevar a cabo ad infinitum. El agotamiento de un recurso natural tiene un impacto negativo sobre el medio ambiente, pudiendo causar su colapso definitivo, que arrastraría con él al sistema social que depende de él para su subsistencia. Pero además tiene efectos graves sobre el proceso de desarrollo, al comprometerlo en el largo plazo. Una de las características de la industria moderna ha sido su persistente tendencia al aumento de la escala de producción, con lo cual los impactos ambientales que produce tienden también a ser mayores. Los sistemas de producción han estado sujetos a cambios permanentes debido a las crecientes necesidades de una población en crecimiento y, por lo tanto, demandan mayores cantidades de productos para satisfacer sus necesidades. Con la primera Revolución Industrial la economía basada en el manual de trabajo, fue reemplazada por otra dominada por la industria y la fabricación. La producción y el desarrollo de nuevos modelos de máquinas favorecieron enormes aumentos en la capacidad de producción. 

¿Cómo las industrias contaminan el medio ambiente?

 La contaminación no es simplemente emisión de contaminantes, sino producto de la emisión de esos contaminantes en su interacción con el medio. El deterioro de la naturaleza está determinado por esta mutua interacción y, por lo tanto, las normas deben ser establecidas en función de las características de cada medio ambiente. La causa principal de la contaminación industrial es la quema a gran escala de combustibles fósiles como el petróleo, el carbón, el gas, más el agua residual envenenada que contamina tierra, ríos y lagunas. El problema de la contaminación industrial afecta al aire, al agua y la tierra. 

¿Cuáles son las industrias más contaminantes del planeta? 

Las industrias que contaminan más el medio ambiente son la ganadería, la minería y la industria de la moda, estas empresas resultan insostenibles para la Tierra. En ARGENTINA, La energía, el sector más contaminante En relación a los diferentes sectores productivos, la energía encabeza las emisiones de gases contaminantes en el país y lo siguen la agricultura y ganadería. 

¿Qué acciones podemos realizar para cuidar el medio ambiente? 

Los efectos ambientales deben ser considerados como parte del proceso de planificación industrial, pero lo importante es que sean introducidos en la toma de decisiones como una dimensión más, que tiene su propia razón de ser dentro del proceso de desarrollo, y no como un impuesto más, un costo monetario a ser considerado en la estructura de costos. La implantación de normas ambientales en los países en desarrollo se está llevando a cabo por simple reproducción de normas ambientales imperantes en los países industrializados, es decir, normas adoptadas en función de las características naturales de esos países que son diferentes de las de la periferia. Si la industria tiene un carácter internacional, en su desarrollo han de tomarse en cuenta las características de cada sistema natural y la interrelación entre éste y el sistema social. Dentro de esta dinámica debe ser estimulada y promovida la industrialización como factor de crecimiento y desarrollo orientado a la satisfacción de las grandes masas de población. Y en ese contexto debe examinarse su capacidad de creación de excedentes. 

¿Cuáles son los elementos que componen el medio ambiente? 

El medio ambiente (definido como el conjunto de elementos naturales, físicos, químicos, Biológicos y sociales que interactúan en un espacio y tiempo determinados sobre los seres vivos y las actividades humanas).

2.3. Medio ambiente, cuidado, equilibrio hombre-medio.

Cuidado del medio Ambiente. Desarrollo sustentable del sector productivo: protección de la naturaleza y equidad social presente y futura. Relaciones armoniosas de los seres humanos entre sí y entre la humanidad y la naturaleza.

PRODUCCIÓN SUSTENTABLE: LA RELACIÓN DE  LA INDUSTRIA CON EL AMBIENTE

La producción sustentable genera rentabilidad a la empresa mientras se mejora la calidad de vida humana, sin exceder la capacidad de los ecosistemas en los cuáles se desarrolla.

Para ello, hace especial énfasis en la buena relación entre el bienestar económico, los recursos naturales y la sociedad.

¿Qué es la producción sustentable con el medio ambiente?

La producción sustentable se origina a partir de la necesidad de fomentar el uso eficiente de los recursos, como consecuencia de disminución de su disponibilidad y  evidencias de los impactos ambientales de algunos procesos industriales.

Una producción sustentable es aquella que, siendo consciente de la escasez,  fomenta el uso eficiente de los recursos naturales y de la energía, la construcción de estructuras que no dañen el entorno, mejora el acceso a los servicios y genera empleos con justas remuneraciones y con buenas condiciones laborales.

Es un progreso continuo que permite lograr planes de desarrollo, que reduzcan los costos económicos y aumenten la capacidad de producción, sin alterar la calidad de los ecosistemas y disminuyendo los índices de pobreza.

¿Qué es el Impacto Ambiental?

Se trata de una alteración en el medio ambiente que produce efectos específicos, es generada por las actividades e intervención humana. Sus efectos pueden ser  de carácter positivo o negativos.

El principal efecto negativo es la ruptura en las dinámicas ecológicas. Que al ocurrir pueden causar daños y perjuicios en el medio ambiente, así como a la salud de todos los seres vivos que hacen uso del espacio.

De igual forma se presentan impactos ambientales positivos, generalmente están referidos al componente sociocultural. Aunque también, pueden presentarse en el medio biológico o físico natural.

Un ejemplo, es la generación de empleo que ocurre al desarrollar un proyecto en una localidad. La nueva oferta de trabajo se considera un impacto ambiental positivo sobre el medio sociocultural.

¿Cómo se atacan los efectos de los impactos ambientales negativos?

A partir de una regulación adecuada, se puede trabajar para reducir el impacto negativo al medio ambiente y aumentar las posibilidades y estrategias para protegerlo.

Otras estrategias vienen por parte de la ciencia y la tecnología. Ellas invierten continuamente en investigación desarrollando  técnicas, materiales, equipos, etc., que eviten o reduzcan posibles daños al medio ambiente.

Importancia de las Buenas Prácticas para una Producción Sustentable

En la actualidad, se entiende como buenas prácticas empresariales, al conjunto  de acciones replicables que ayudan a mejorar de manera significativa un producto, proceso o situación.

Las buenas prácticas ambientales, fomentan principalmente la conservación de la biodiversidad, sobre todo en industrias con actividades de mayor incidencia sobre el territorio.

El uso eficiente de los recursos en la industria y la concientización son indispensables para mejorar la sostenibilidad y optimizar la producción. Además, resultan esenciales para potenciar la innovación tecnológica e incrementar la eficiencia de los equipos.

Nuestros consejos sobre Buenas Prácticas ambientales:

La conservación del medio ambiente requiere incorporar hábitos de vida y producción sustentable  que se reflejen en acciones cotidianas, como el  cuidado del agua, el reciclaje y la separación de residuos. Cada uno de nosotros debe incorporarlas en su vida diaria ya que el impacto positivo será enorme cuando todos vivamos de manera consciente.

Existen muchas guías y manuales de buenas prácticas ambientales dependiendo de la actividad. Nosotros, en tu trabajo y en tu casa, te recomendamos,:

  • Apagar las luces de la oficinaal finalizar la jornada de trabajo.
  • Revisar continuamente los mecanismos de agua, ya que una pérdida continua puede desperdiciar unos 20 litros al día.
  • Clasificar los residuos según su naturaleza(papel y cartón, plástico, materia orgánica, etcétera) y depositarlos en contenedores específicos para su reciclaje o reutilización.
  • Manipular con precaución los residuos peligrosos(tóner, equipos electrónicos, pilas o fluorescentes) para evitar accidentes y contaminaciones.
  • Reducir el consumo energéticoincorporando luminarias LED y aprovechar la luz natural.
  • Usar bolsas ecológicas.

 

La relación hombre-naturaleza como fenómeno social

La relación hombre-medio ambiente natural es, antes que nada, una relación unitaria, que implica una interacción recíproca entre ambas entidades, que aisladas de su dialéctica carece de sentido. No existe un medio ambiente natural independiente del hombre: la naturaleza sufre siempre su acción transformadora y a su vez lo afecta y determina en un proceso dialéctico de acciones e interacciones.

La historia del hombre ha sido la búsqueda constante de instrumentos y formas de establecer relaciones con la naturaleza y, a través de este proceso histórico, la ha ido utilizando y adaptando a sus necesidades. Dicha modificación permanente de la naturaleza afecta al mismo tiempo al hombre, originando cambios en sus condiciones de vida y en las relaciones con sus semejantes.

Dentro de este proceso dialéctico de influencias recíprocas, la relación hombre-naturaleza no se da en términos abstractos, sino del hombre en tanto grupo social, parte de un determinado sistema social, en un medio ambiente específico. La relación del hombre con la naturaleza y la transformación que deriva de esta relación es así un fenómeno social. No existe, por lo tanto, una escisión entre sociedad y naturaleza o, mejor dicho, entre sistema social y sistema natural, debiendo éstos ser concebidos como partes de un todo, como dos subsistemas interrelacionados, integrados a un sistema mayor.

El contexto general dentro del cual se mueve el hombre está determinado, por un lado, por aquellos fenómenos físicos, geofísicos, biológicos, químicos, etc., que plasman una realidad ambiental y cuya dinámica es la de los fenómenos naturales. Y, por otro lado, por la presencia de la actividad humana, que define la realidad social, realidad que --al transcurrir en una dimensión histórica-- trasciende el medio natural.

Si se acepta esta interdependencia hombre-sociedad-medio ambiente, entonces surge la necesidad de enfrentar la problemática ambiental dentro de sistemas analíticos comprensivos, que representen, en forma adecuada, esa realidad que históricamente se ha ido integrando hasta alcanzar una dimensión planetaria.

A lo largo de la historia, la acción del hombre sobre los procesos naturales se ha ido materializando en lo que podría llamarse un medio ambiente construido, que se superpone al medio ambiente natural: el proceso social-histórico se lleva a cabo en un lugar dado, en un espacio que preexiste a la vida humana y a cualquier sociedad. Se trata del espacio físico, natural o, en su acepción más común, del medio ambiente. Con el devenir histórico se va creando otro espacio que está básicamente determinado por las relaciones humanas y por su modo de organización social. Junto al espacio físico preexistente se construye así un espacio social. Ambos están estrechamente interrelacionados, a tal punto que no es posible distinguir el uno del otro de no mediar un proceso analítico.

Estas consideraciones permiten concebir la relación medio ambiente-sociedad dentro de una dimensión espacial. Al mismo tiempo, es importante tener presente la dimensión temporal subyacente a la interacción entre ambas entidades: la relación sociedad-naturaleza no tiene sentido único; se trata de un proceso esencialmente recíproco y cambiante. La intervención del hombre sobre el medio ambiente y las consecuencias que de ello se derivan no son hechos o fenómenos aislados, sino que transcurren dentro de un continuo temporal. Es preciso entonces conocer las relaciones en sus movimientos, en su dinamismo, teniendo en cuenta que la acción del sistema social está ligada a su historia y a los tipos de organización que el grupo adopta en un momento específico.

Al abordar la dimensión temporal, la existencia de dos tipos de tiempos se hace evidente: el tiempo en que transcurre la sociedad humana y el de los sistemas naturales. El primero corresponde a la realidad social, que va generando su propia sucesión a través de un proceso dialéctico, originando nuevas relaciones entre los individuos y, por lo tanto, nuevos mecanismos de regulación del proceso social y natural. Este recurso temporal está organizado en secuencias, cuyo término está definido por el cambio cualitativo que resulta de la interacción dialéctica producida en su seno.

El proceso social se lleva a cabo dentro del ámbito natural representado por el conjunto materia-energía, constituyentes de la biósfera. Este conjunto tiene también su tempo determinado por la duración de los fenómenos biológicos, físicos, geofísicos y químicos. Su realidad temporal es anterior a la de los fenómenos sociales y su ritmo es diferente.

Por lo general, las manifestaciones naturales son de muy largo transcurso, en cuanto a cambio cualificativo se refiere, pero también pueden ser súbitas y violentas, alterando por completo un proceso y afectando profundamente la base natural sobre la que se asienta la vida humana. Po otro lado, la realidad social y la acción humana van modificando la naturaleza a un ritmo determinado de gestación y maduración previa a su manifestación percibible. Se gestan así cambios en el sistema natural acordes a una realidad temporal propia del sistema social.

La realidad social es regulada y modificada por el grupo de acuerdo con su forma de organización, su sistema económico y su universo valórico. La realidad natural es regulada a su vez por la dinámica de los fenómenos naturales.

Entre los sistemas sociales y el medio neutral existe un mediador: la tecnología. Cada vez en mayor medida el grupo social se sirve de este mediador para obtener los bienes que requiere la satisfacción de sus necesidades. Dichas necesidades cambian, dependiendo de las pautas culturales, de las estructuras económicas, de las características políticas del sistema social en cada momento histórico y del proceso de desarrollo. Se va produciendo así una progresiva diversificación y una complejidad creciente en las necesidades sociales, que requieren, para ser satisfechas, un proceso productivo más sofisticado. Con ello, la relación sociedad-medio ambiente se torna más intrincada e interdependiente.

La mayor complejidad de las relaciones medio ambiente-sociedad se manifiesta históricamente en distintas formas de producción y en una red cada vez más estrecha de relaciones entre ellas. La creciente integración del sistema mundial introduce en este proceso dinámico un nuevo elemento. En efecto, las acciones del hombre sobre un determinado ecosistema natural, en un espacio geográfico definido, afectan otros sistemas naturales, a veces muy distantes. Y, lo que es aún más importante, el proceso decisional en el mundo de hoy se lleva a cabo en espacios sociales, económicos y naturales a menudo diferentes y geográficamente distantes de aquellos en los que prácticamente se ejecutará.

Se conforman así sistemas más globales de relaciones en los que la dinámica entre medio ambiente y sociedad deja de ser inmediata para verse afectada, influida o determinada por las acciones de otros grupos sociales distantes, tanto espacial como temporalmente.

De lo anterior se deduce que medio ambiente y sociedad no sólo se deben analizar en su dimensión espacial, sino también en función de los periodos históricos por los que atraviesan y por las formas de organización social que se adoptan en cada uno de ellos. Espacio y tiempo son, pues, las dimensiones en que coexisten el sistema social y el sistema natural, no en tanto categorías abstractas, sino como entidades reales de un proceso concreto. En este contexto, periodos históricos y sistemas espaciales de relaciones generan sus propias estructuras conceptuales que, en el marco de formas de producción específicas, dictan estrategias de desarrollo y procesos de gestión del medio ambiente.

No existe una ciencia que sea independiente de un determinado contexto ideológico, sino más bien una relación funcional entre ciencia e ideología. Por lo tanto, en el estudio de esa relación, hay que explicar cuáles son los objetivos subyacentes de la forma de conceptualización utilizada para definir la relación sociedad-medio ambiente.

Aunque tradicionalmente las ciencias económicas no se han ocupado en forma explícita de dicha relación, ésta subyace, ya sea en la interpretación o en el análisis del fenómeno económico y en los supuestos que en él se adoptan. Por otra parte, el concepto de desarrollo es también un tópico relativamente reciente, no definido por los clásicos, ignorado por los neoclásicos y asimilado al crecimiento económico por los Keynesianos. Pero no cabe duda que las políticas que se derivan de las diferentes doctrinas suponen un proceso de desarrollo, una intención en relación con el futuro.

En general, las ciencias económicas reflejan una determinada ideología y responde a la interpretación que, en función de esa ideología, se hace de una específica situación histórica cada doctrina económica ha estado condicionada por la circunstancia de su tiempo.

La relación entre la realidad y el pensamiento económico se concibe así como un proceso dialéctico, que hace que el contenido doctrinal de la ciencia económica vaya cambiando a medida que cambia la sociedad.

Si la realidad está constituida por lo natural y lo social en su interrelación mutua, entonces la relación medio ambiente-desarrollo es ineludible, íntima e inseparable. Esto implica que no es posible interpretar el fenómeno del desarrollo prescindiendo de la dimensión ambiental y, consecuentemente, que no es posible alcanzar objetivos y metas del desarrollo sin explicar la dimensión ambiental.

Toda concepción de desarrollo que proponga y oriente la actividad económica y social hacia determinados objetivos, ignorando el contexto ambiental del sistema social, tarde o temprano llevará a un proceso de deterioro del medio natural que, en el largo plazo, frustra el logro de los objetivos socioeconómicos. Por consiguiente, en el largo plazo, las consideraciones de orden ambiental no pueden ser ignoradas so peligro de que el proceso de desarrollo se vea comprometido. Por otra parte, una concepción estrictamente ecologista o ambientalista, que haga abstracción del sistema social, sus conflictos en términos de poder, sus desigualdades y sus desequilibrios, ocasionará también un deterioro del medio ambiente, al no considerar los factores causales de orden social y económico que dan origen a este deterioro y al aplicar criterios de racionalidad ecológica ajenos muchas veces a los objetivos sociales. Así, por un lado, la sociedad opulenta explotará al máximo el medio ambiente para satisfacer necesidades suntuarias o superfluas, mientras que los más necesitados lo deteriorarán en su afán de proveerse con el mínimo requerido para subsistir.

Los objetivos de desarrollo económico y social deben sustentarse en un manejo adecuado del medio. Más aún, el medio ambiente es el conjunto de recursos que pueden ser explotados con racionalidad económico-social y ambiental, para el logro de objetivos de desarrollo válidos a largo plazo.

Aceptando este enfoque, se llega a un concepto de desarrollo que implica la necesidad de un proceso armonioso con el medio ambiente que, al mismo tiempo, no sacrifica sus objetivos sociales fundamentales.

Esta concepción de desarrollo exige no sólo una revisión del concepto mismo, con vista a considerar la dimensión ambiental, sino también del alcance de otros conceptos que han sido asimilados al de desarrollo, a fin de poner de manifiesto la ideología implícita en cada uno de ellos y los modos de gestión y acción son siguientes. En ellos se han subrayado --dependiendo de quién utiliza el término-- uno o más aspectos del problema, pero nunca su totalidad. Es importante destacar que cada interpretación del término conlleva una política definida, es decir, la aceptación de un determinado concepto presupone una orientación en la acción futura. De ahí la necesidad de precisar la concepción de desarrollo frente a otros conceptos que pertenecen a cuerpos teóricos diversos.

Así, desarrollo y riqueza son conceptos similares para algunos. Para otros, desarrollo equivale a riqueza e industrialización. Otros más identifican desarrollo con riqueza y tienden a definir una política que maximice la riqueza, mientras que los que asocian el desarrollo con la industrialización propiciarán la creación de industrias, y quienes identifican desarrollo y crecimiento promoverán un proceso de expansión económica. Cada uno de estos conceptos tiene sus raíces en interpretaciones económicas elaboradas en determinados momentos históricos, para responder a problemáticas específicas y propias de la coyuntura, y reflejarán además la ideología de quienes teorizaron y racionalizaron una situación dada, con vistas a justificar la acción política.

ACTIVIDAD:

Dentro del TEXTO leído, ¿que piensa Ud. con respecto a las relaciones armoniosas de los seres humanos entre sí y entre la humanidad y la naturaleza, Existe?

RESPUESTA: 
Para partir quisiera compartirles la definición de ARMONIA (Relación de paz, concordia y entendimiento entre dos o más personas). Con esto quiero aclarar, que la relación siempre existió, pero no sé si armoniosamente, es decir una relación de PAZ, CONCORDIA Y ENTENDIMIENTO, esto es en base a la lectura analizada.

“La relación del hombre con la naturaleza y la transformación que deriva de esta relación es así un fenómeno social”

No existe un medio ambiente natural independiente del hombre: la naturaleza sufre siempre su acción transformadora y a su vez lo afecta y determina en un proceso dialéctico de acciones e interacciones.

La historia del hombre ha sido la búsqueda constante de instrumentos y formas de establecer relaciones con la naturaleza y, a través de este proceso histórico, la ha ido utilizando y adaptando a sus necesidades. Dicha modificación permanente de la naturaleza afecta al mismo tiempo al hombre, originando cambios en sus condiciones de vida y en las relaciones con sus semejantes.

La relación del ser humano con la naturaleza no ha mantenido un patrón constante en el transcurso del tiempo. Sin duda alguna la interacción entre los primeros habitantes y su ecosistema no es la misma que tienen hoy los habitantes globalizados de este planeta con su medio. Si vemos a través de la historia sinteticamente podemos ver que se divide en etapas: La primera se extiende desde el origen del ser humano hasta el desarrollo de la agricultura; la segunda abarca el progreso de la agricultura hasta el descubrimiento de América; la tercera incluye el período entre el descubrimiento de América (o más precisamente el desarrollo del comercio marítimo) y la revolución industrial, y la cuarta comprende desde la revolución industrial hasta el comienzo del fenómeno conocido como globalización, que podría situarse a mediados del siglo XX.

SALUDOS..

Comentarios